lunes, 10 de enero de 2011

Primera entrada de 2011.

He decidido retomar el blog. No sé que contar, pero bah, algo se me ocurrirá. Me quedan DJVs que leer... pero ya lo haré cuando acabé con los globales de B.I. de momento, solo actualizo esto, chicas.
Ines, ¿dónde queda tu movida de la llamada del ángel? Jo, os echo de menos. En fin.

Puede que no lo comprendas. Tengo que repetirlo cientos de veces, y aún así, queda espacio para la duda. Es pequeño, pero resquebraja mis paredes. Algún día explotarán. Se cuela por las rendijas de mi mente cuando estoy sola. Creo que he descubierto el remedio de mi enfermedad. Procede de la fuene misma de la infección. O me matas, o me sanas. Es la idea. Creoq ue la vas pillando. Cuando estás cerca solo puedo pensar en tí. Se callan las voces, hay paz. A veces pienso en cómo sería perderte; y la angustia se apodera... pero suelo quedarme pensando en tí de manera abstracta, y eso está mejor. Ahora, estos días, venimos estando bien; y es por eso. Mucho tiempo a tu lado, anestesia para mi cabeza maltrecha. La idea es pasar tiempo contigo, intentar ser felíz. Vale, que no se me da bien... lo sé. Pero, ¿qué voy a hacerle? Nací así, me fuí haciendo. No creo en el amor. Me da miedo. Me aterrorizaba quererte, pero tengo que ser franca conmigo. Ahora uqe lo hago, lo mejor es que estemos juntos. Supongo que si no, sería aún peor. Yo.. tengo que dejar de pensar. Darle vacaciones a mi cabeza, o explotaré... Y hasta que descubra cómo, puedo seguir tirando, mientras te vea mucho. Mientras piense en tí y no en lo que estoy haciendo con mi vida... Te quiero, que mierda.

[A.I.; lo echaba de menos.]

sábado, 10 de julio de 2010

He vuelto, te lo dije, crisis.

Visto lo visto... mi amor ahora mismo vale, no es imposible, pero eta jodidillo. Asiq ue regreso por aquí, y NO!! Por fin no es para hablar de manu;)

Estás feliz. El mundo se acaba de detener a tus pìes. Él te lo entrega, lo pone en tus manos. Te sientes bien, importante... feliz otra vez. Y de repente, la culpa te abofetea. Te da con todas sus fuerzas, en el medio de tu cara. Te la cambia, te la rompe... te quiebra el momento bonito.
-¿Qué pasa?
-Es que... no sé si puedo estar contigo. Es por ella.
Tú sabes que le quiere. Él también lo sabe. Se le crispa la cara. Sabes que, aunque no puedes verte, la tuya tiene peor aspecto... ¡Ella te cae bien! Y eso es una putada, la verdad. Le quieres.¿Puedes querer a alguien tan sólo en 4 días? Alguien racional te respondería que no. ¡No sabes nada de esa persona! No, no puedes... no, no. Pero, ahora, piénsalo detenidamente. ¿Es acaso el amor algo racional? NO. ¿Entonces?
Te ha pasado. Te fijas un poco, habláis... terminas contándole cosas que no sueles contar, a nadie. Secretos íntimos. Y él hace lo mismo. El corte se acaba. El miedo se acaba. Todos lo saben, la gente os mira y dice que acabaréis juntos. Que os miráis con algo especial en la mirada.
Pero no haces caso. Lo que sientes es tan extraño, que es imposible que sea cosa de dos. Pero lo es. Y te quiere, y se declara... Y el mundo se detiene, justo antes de que digas un sí tímido que te transportará al mundo de la felicidad más absoluta... y que conseguirá que el resto de la gente que habita el planeta se minimice... menos ella. Lo sientes por ella, te sientes fatal. Tu felicidad hecha pedazos, trizas... y lo sientes, pero decides no dejarle. Es tu felicidad frente a la suya, y, por una vez, decides ser una egoísta empedernida.

Lo siento de verdad, jolin. Que asco.

martes, 23 de febrero de 2010

La Llamada del ángel 2º Temp. Final

X FIIIINNN





Vamos a ver os resumiré el Capítulo 6. A las chicas les digo que soy una demonia, a todas ellas, después de pegarme con Crisuu en la puerta del prica y borrarle la memoria a la mayoría de los presentes. Y bueno, a todo añádele a Crisuu vestida entera de negro, com uno leggins, rotos una camisola, pirsings x todos lados y esas cosa XDD A bueno, por si no os acordais, se supone que debemos obtener la sangre de Christian, a media noche, para el ritual.



Y ahora El Cap 7



Eran casi las diez cuando llegué a casa. Marcus estaba en la cocina, preparando la cena y Christian en el patio tirado en la hamaca (mítica hamaca entre deo árboles, para dos personas ; comprada por mis padres para sus encuentros románticos, esta era la quinta hamaca en ese mes). Dejé la mochila en el sofá del salón y me dirigí al patio, la luna estaba llena, las pocas luces que habían me señalaban el camino hasta Christia, que tenía los ojos cerrados y los brazos detrás de la cabeza. Con cuidado me eché a su lado y apoyé mi cabeza en su pecho, oí el latido, reposado, de su corazón, suave y repetitivo, era hermoso y tenía miedo que en un par de horas pudiera acabarse, para no volver a sonar jamás. Su mano, derecha, se posó en mi cabeza, acariciándome lentamente.

-¿Ya está todo listo?-

-Sí- Su voz era tranquila y relajada, como el latir de su corazón.

-¿Tú estas listo?-

-Sí-

-¿Si?-

- Enlas noches de luna llena, como esta- pasó de mi pregunta y se puso a

hablar- solía transformarme y salir a volar, como lo echo de menos.

Quiero volver a volar, con toda mi alma, pero el precio por ello es

demasiado alto...-

- Christian... ¿qué es lo que tienes que hacer, para volver a ser un ángel?-

- Te dije que lo olvidaras-

- No puedo. No quiero verte sufrir-

- Inés.. Déjalo estar, pronto todo acabará-



Nos quedamos quietos, mirando al cielo, sin decirnos nada. El tiempo parecía estar en nuestra contra, porque al poco llegaron las doce y nosotros ya estábamos en medio del bosque.

Marcus nos guió a un claro, con una enrome piedra en medio, lisa y plana, de mas o menos metro y medio de alto y dibujado sobre ella un pentágono, en tiza blanca.

Marcus sacó una copa, con un líquido negruzco en su interior, de la bolsa de piel que llevaba, y se la tendió a Christian que se lo tragó hasta el fondo. Me giré para ver a Marcus sacar de su bolsa, una daga con unas extrañas letras grabadas en ella y pronunciaba unas palabras en latín, era un banedición a Satán, que él me había enseñado. Luego Marcus mandó a Christian acercarse, el cual se había quitado la camiseta, se caercó al altar y se colocó al lado izquierdo de Marcus, este tomó su mano derecha y le hizo un corte, con el cuchillo bendecido, en las venas.

La sangre de Christian rodó por su brazo antes de caerse en la roca, que empezó a emitir un resplandor en ese color anaranjado y entonces yo enloquecí. Olí la sangre de Christian, sentía su sabor en mi boca y no pude hacer nada. Christian que giró, me miró tiernamente, mientras yo me transformaba y me lanzaba sobre él. Nada de él reflegaba miedo alguno, aunque yo ya estaba a escasos pasos de él, al contrario, estaba relajado y parecía hasta emocionado...

Me tiré sobre él, cayó sobre la piedra y yo encima de él. Estaba sonriendo, no paraba de sonreir, mientras yo le mordía el cuello y chupaba cada gota de sangre de él. Fui notando como su corazón se debilitaba, pero no podía parar, había logrado mi objetibo, después de todo, al fin, le había matado....

Me sentiá más viva que nunca, como si fuera una especie de droga. Observé, con deseo, como la sangre recorría su cuerpo, hasta el pentágono, que resplandecío con fuerza. Volví sobre su cuerpo y acabé le lamerle y chuparlelas pocas gotas de sangre que quedaban dentro de él, cuando su corazón estuvo seco del todo me separé y lamí la sangre de mis labios. Ya incorporada miré al cuerpo, sin vida, de Christian, estaba sonriente y tranquilo con los ojos cerrados, parecía simplemente dormido. En ese momento me odía porque pensé que Christian me daba igual y que no me importaba que hubiera muerto, sólo pensaba: "Tengo a Marcus, que es mucho mejor".

Entonces Marcus me agarró por los hombros.



-Hciste lo que debía-

-Lo sé-

-Si no, te hubiera matado-

-¿Qué?-

-Los de arriba le mandaron matarte para volver a ser un ángel, pero, sabiendo que moriría hoy,

lo prefirío antes que acabar matándote a tí-

-Aaaa... Que se joda- Noté como si algo se me rompiera por dentro, en la vida hubiera dicho

una cosa así. Una parte de mí quería coger el cuchillo de Marcus y morir junto a Christian, pero no lo hice.

-Sí, que se joda-

-No pensaba que tardaría tando- Dijo una voz a nuestras espaldas- Al parecer el líquido funcinó,

no te puedes fiar del autocontrol de la realeza-



Me giré y ahí estaba Cris, bueno, el Irfio, al segundo siguiente el cuerpo de Cris se cayó al suelo y se materializó, ante nuestros ojos, una sombra, que fue tomando forma de mujer, pelo corto, negro, ojos amarillos y un arañazo en el ojo izquierdo, su aspecto era salvaje y tosco. Llevaba una falada negra, rota y una tira negra de cuero, en el pecho, de la cintura le colgaba una espada y en la espalda llevaba un arco con flechas.

Después de salir de mi asombro corrí a ver como estaba Cris, comprobé que sólo estaba inconsciente. Me giré, de nuevo, para ver a Marcus, que tenía entre sus brazos al Irfio y, con devoción, la besaba. El alma se me cayó al suelo, mis ojos no podía creer lo que estaban viendo, pero era cierto. En ese momento el efecto de extásis y todo eso se me pasó de golpe. Volví al mundo normal y me dí cuenta de lo que había pasado y hecho.



-Marcus, mi amor, tenía razón, no te ha costado nada engañar a la princesita-

-Cualquier cosa para tenerte conmigo, gotita de sangre mia- Vaya ÑOÑADA MACABRA que soltó el colega- Y por sacarme a ese angelucho de en medio-

-¿Qué hacemos con ella?-

-No podemos hacerle nada-

-Tienes razón-



Marcus la soltó y se arrodilló a mi lado.



-Te voy a explicar lo que ha pasado, esto todo lo planeamos Benedit- Señaló a la Irfio- y yo, para deshacernos del angelucho y poder estar juntos. Tu abuelo, nos echó una maldición, pero tu padre no sabía anda y por eso estas aquí hoy. Para juntarnos, alégrate-

-He matado a Christian-

-Sí, esa era la idea. Benedit podría estar en este mundo conmigo, para la eternidad juntos, sin que nadie los molestase, si el ángel moría. Claramente yo no tenía tanto poder para acabar con la vida de un hijo de Arcángel, pero Tú, tú sí-

-¿¡Para que tú y esa ZORRA, pudiérais estar juntos, me cargué a lo mejor de mi vida?¡- Dentro de mí algo explotó, lágrimas salieron de mis ojos, para mitigar lo que llevaba dentro.

-Podría decirse que sí. Pero no te pongas celosa, tú eres algo especial para mí [;)]- Benedit se rió por detrás.

-¡AAAAAAAAAAA!- No podía dejar d egritar, nunca había experimentado tanta rabia.



Mi cuerpo se combulsionó, antes de tomar la forma de espíritu demoníaco y lanzarse contra Marcus. Y entre un mar de lágrimas, llantos y sangre acabé con él, de la misma forma que había acabado con Christian. Benedit, se fue corriendo, en cuanto levanté la vista, mientras el cuerop de Marcus de convertía en ceniza y la rodeaba, para lanzarme contra ella. Sabía que no me perdonaría jamás, haber acabado con la vida del único ser que amaba y que la amaba. Pero no pensaba dejar así las cosas, pensaba encontrarla y matarla, no pensaba parar, hasta acabar con ella con mis propias manos.



Ahora, esa era la única razón por la que decidí seguir viva...













InE..+

lunes, 26 de octubre de 2009

Tu y yo tenemos un problema

-¿De verdad que no quieres suicidarte?
-O.O ¿Pooooor que querria hacer eso?
-Porque no crees en el amor. Porque piensas que toda la magia se puede explicar. Porque opinas que los sentimientos no valen nada.
-Oye, que no sea una tonta enamoradiza no quiere decir que este al borde de la desesperacion.

Hola una vez mas, tontas enamoradizas del mundo. Ya esta aqui Crisis otra vez para haceros de rabiar o, si eres como yo, para ponerme a soltar verdades por mi boquita.
¿Que es eso de que no aceptas que el amor es una hormona? ¿Que me dices tu a mi de la magia?
Admitelo. Estas sujeta a la naturaleza.
Lo que sientes es una ilusion.
Son hormonas. No hay magia. Es todo un simple espejismo que puede desvanecerse en cualquier momento.
Tambien hay mas cosas, no os creais, aqui hay para todas. Los sentimientos. Los sentimientos por encima de todo ¿verdad? Es lo que quereis. sentir primero y pensar despues.
Pues, si podeis escucharme entre el estrepito de vuestra inminebte caida, os advierto que lo vais a pasar mal. Hay que ser calculadora, chicas. Hay que tener la cabeza fria.
En cristiano, que no te tires a la piscina si no sabes si hay agua. Yo odio las matematicas como la que mas pero no se me escapa que rigen el universo. Las cosas son exactas, o si o no, o te la pegas o vuelas hasta que te la pegas mas tarde.

Los finales felices son solo finales incompletos.

miércoles, 7 de octubre de 2009

Porque me sales de las narices

"-oie, ia se q te lo e dicho un monton de veces, pero te qiero.
- xq me dices eso? qiero decir, xq me qieres?
- xq, no se supone q cada uno se enamora de qien le sale de las narices?
- nose, supongo...
- bueno, pues aora tú me sales de las narices."

madee in eli :(. pd: leqiero.

viernes, 2 de octubre de 2009

.

Es difícil mantener la postura de pasota cada sábado, peero nada había conseguido quitarme las ganas de ir...hasta hoy.
Porque, vale que se te echa de menos, vale que nada es lo mismo, que he cerrado los ojos con fuerza en cuanto me faltaste, y me he imaginado que venías... pero no sólo no apareciste, sino que te regodeaste de mi soledad.
Bueno que no estoy sola, pero yo lo veo así...Y todavía lo siento.
Siento haberte dicho que te quería, demostrándole a tu ironía que eras lo más importante... y siento haberte perseguido como un perro... y, en cuanto aprenda a dejar de hacerlo y no meimportes nada, pienso decirte todo esto a la cara, para que me trates de una vez por todas como me merezco.


pd: alguien me explica xq le qiero...?

sábado, 26 de septiembre de 2009

LA LLAMADA DEL ÁNGEL 5º Cap






CAP 5



Llegué a mi casa, hacía varios días que no veía a mis padres, aunk no estaba preocupada. Marcus estaba tirado en el sofá, como de costumbre, llevaba una camisa negra, desabrochada y unos pantalones negros. Dejé en la puerta mi mochila y fui hasta el salón, me planté enfrente de él, apartó su vista del libro y me miró con sus intensos ojos carmesí.

-¿Qué tal el día?- Le pregunté sonriente
-Pues supongo que bien, aunque no me acostumbro a este mundo... Es tan...-

No pude aguantarlo más, me eché a sus brazos.

-Superficial...- Después del chock, me abrazó con fuerza.

Las lágrimas rodaron por mis mejillas, necesitaba a Marcus y no sabía el motivo, era algo superior a mí. Él no dijo nada, sólo me abrazó, sabía que no quería hablar de ello y eso me gustaba de Marcus, me comprendía...
Llevaba unos días pensando, demasiado, en Marcus y no me molaba nada lo que me pasaba, porque tampoco paraba de pensar en Chris y no me parecía justo. No pasó mucho hasta que me separé y me incorporé sin decir nada. Subí a mi cuarto y me encerré en mis pensamientos, hasta la hora de comer.
Bajé y me encontré con un Marcus servicial y sonriente, que me ofreció un montón de comida, cocinada x él. Me preguntó como estaba y con una sonrisa le dije que mejor. Durante la comida comentamos sobre el calentamiento global, que acabó transformándose en una de las mejores discusiones sobre ropa, que jamás había tenido... (No pregunteis).
Mientras ayudaba a Marcus a limpiar los platos, por sorpresa él me abrazó por detrás, no sé cómo había sabido que lo necesitaba.

-¿Cómo lo supiste?- Me atreví a preguntarle.
-No lo sé, pero ultimamente te siento-
-¿Me-me sientes?-
-Sí, sé lo que sientes, más o menos. Más bien es una intuinción-
-¿Por qué?-
-Supongo que por la proximidad-
-Gracias-
-No, gracias a tí-

Me giró, en sus brazos, y quedé mirándole, suavemente apartó un mechón de mi pelo y volvieros a surgir las lágrimas en mis ojos.
Me sentía extrañamente segura en los brazos de Marcus, Cosa la mar de rara, quería irme, pero a la vez no podía moverme ni un centimetro.
Lentamente deshizo el abrazo y siguió con los platos, corrí escaleras arriba, preguntándome que pasaba. En mi mesita estaba sonándome el móvil, era Miri, ¿qué habría pasado?.

-Dime-
-¡¡Tía!!..¿Qué fue lo de por la mañana? ¡qué miedoo¡- Dijo alterada
-No tengo ni idea, pero es pila raro-
-NO ya..-
-Ultimamente pasan cosas pila raras, lo de Cris, lo mio con Marcus..-
-¿Qué pasó con Marcus?- deprontos pareció muy interesada.
-No seé, que me siento demasiado bien con él-
-Aaaaaaa... Tía debería llamar a Crisuu-
-Puede...Voy a ir a visitarla-
-Mejor, luego me cuentas-
-Okis, venga te kiero-
-Xao, besos-

Volví a bajar, Marcus seguía lavando los platos, distraído, me acerqué a él.

-Me voy-
-Vale, no te metas en problemas-
-Yo nunca me meto en problemas [0=)]-

Se giró y me miró, un impulso me hizo darle un rápido beso en los labios, lo hice y antes de que me dijera nada...

-ADIOS-

Y salí corriendo.

Llegué al gran bloque de edificios donde vivía Cris, piqué en su piso. Me abrieron sin preguntar. Subí en el ascensor y empujé la puerta, que estaba abierta, a simple vista no había nadie, recorrí el pasillo y llegué a su cuarto, abrí la puerta. La ví sentada encima de la cama, con las piernas cruzadas, su pelo estaba despeinado y por encima de sus ojos, que me miraban, intentando penetrar en mí y leer mi alma y su boca se curvaba en una sonrisa algo diabólica, llevaba puesto una camiseta negra y unos shorts vaqueros, encima de unas medias negras, rotas, entonces supe que algo no iba bien cuando ví un colgante con un pentágono en su cuello, de gargantilla, y brillando con la luz anarnajada que había visto, por debajo de mi puerta, el día que conocí a Marcus.
La que me estaba mirando no era Cristina y no tenía ni puta idea de lo que era.

-Sabía que no tardarías en venir-
-¿Qué? o ¿quien eres tú?-
-Tu querida amiga Cris. ¿No me reconoces?-

Con sus brazos se impulsó y dió un salto hasta ponerse delante de mí.

-Tú no eres Cristina-
-Bueno..., es tu problema no creerme-

Su mano alcanzó mi cuello y me estampó contra la pared, apretándome y cortándome la respiración.

-Mmmm... Voy a disfrutar matando a una cazadora de demonios..-
-¿Una qué?- Tosí.
-No te hagas la santa conmigo, te he estado observando a tí y a tu angelito..
Bueno, debería decir MÍ angelito-

Intenté soltarme, pero sólo conseguí que apretara más. En mi mente fui formulando un conjuro de bola de energía cuando ya lo tuve, se lo lancé y la hice retrocer un poco, lo suficiente para poder salir del cuarto, pero cuando quise darme cuenta, estaba delante de la salida.. esperándome.

-¡Sal de Cris¡-
-Ains..[v.v']¿Por qué debería hacerlo? Una simple cazadora no me asusta-
-Pues deberías asustarte- Saqué una de mis navajas, aunque había dejado la mayoría en casa, siempre llevaba mi favorita..jiji..tenía un mecanismo especial que la transformaba en un sable...
-JAJAJAJA, ¿crees que me vas a hacer daño con esa espadita? recuerda
que este es el cuerpo de tu amiga-

!!Mierda¡¡, me tenía cogida por los huevos.

-No me obligues a usarla-
-Sencillo, entrégate-
-No sabes con quién estas hablando-
-Sí, con una sucia cazademonios-
-¿¡Cómo osas?!- Siempre había querido decir eso.
-No creo que merezcas un trato mejor-
-No tienes ni puta idea de con quien hablas-
-Sorpréndeme [u_U']-

Lentamente me transformé y su cara se horrorizó.

-¿Ahora me crees?-
-¿¡Prin-princesa?¡ [:|]-
-Supongo..-
-No tenía ni idea-
-¿Ahora saldras de mi amiga?-
-Un segundo...¿Qué hacías con el ángel?-
-No es de tu incunvencia-
-¡Entonces es verdad¡-
-¿El qué?-
-Estas con el ángel-
-No.. yo-
-Tú no mereces ser princesa- dijo con rabia y desapareció en la nada.

Bajé corriendo las escaleras, siete pisos [-.-''], pero cuandoiba por el cuarto, me tiré por el hueco de las escaleras, no podía perder tiempo.
Salí del portal, sentado, en un banco estaba Chris, que me miraba asombrado.

-¿Qué haces aquí?- le pregunté
-Quedé con Cris.. ¿tú?-
-Vine a verla, pero.. No me la encontré-
-¿Qué?¿explícate?-

Le conté lo que me había pasado, pero no pareció sorprendido.

-¡Ya lo sabias!-
-Ahora entiendes porqué me necesetiba, estaba tratando de averiguar
qué era esa cosa que estaba dentro de ella-
-¿Cuánto lleva así?-
-Pues un mes, pero ultimamente se le notaba más-
-¿Lo sabe alguien más?-
-No-
-Debemos saber qué le sucede-

Fuimos hacia mi casa corriendo, si alguien sabía lo que le sucedía a Cris ese era Marcus, espezaríamos por preguntarle a él.
Nada más llegar, como un rayo, fui hasta el salón, esperándo enconrármelo, pero allé no había nadie...
Subí a mi cuarto, donde, me encontré a Christian miarando a mi almohada fijamente, como soñando para sí. Me acerqué a él por la espalda y me quedé quieta esperando a que acabara. A los cinco minutos se volvió y me miró.

-Estaba recordando el día en el que tefuiste.. En lo que pasó..
Y en lo que me ocurrió despues-
-¿Qué ocurrió después?-
-Pues... Los de arriba se enfadaron bastante cuando pasó
lo que pasó y.. me quitaron los poderes-
-¿¡Qué?¡
-Pues eso, me los confiscaron-
-Te los van a devolver ¿no?-
-Para eso.. debería hacer algo que me pidieron-
-¿Y eso es...?-
-Algo que no piense hacer..-
-Vale... Pero puede que yo te ayude-
-¡NO![¬¬]¡Jamás vuelvas a decir eso¡-
-Sólo lo digo por ayudar ¿vale?. Me acabaré enterando y, te juro,
que haré lo imposible por rehalizarlo, porque por mi culpa perdiste
tus poderes...-
-No jures... Jamás te enterarás-
-Soy una diablesa... puedo sonsacartelo-
-Me dejaron una barrera contra diablos.. Asi que no te molestes-
-Bueno.. pero sigues siendo un hombre y yo soy una mujer, puedo
insinuarme y sonsacártelo-
-Mmm... eso quería verlo- Con voz insinuante.

Se giró y me miró desafiante, pero divertido.

-Como quieras.. Tú lo has querido- sonreí de oreja a oreja.

Fulminé el centimétro que nos separaba y puse una mirada "seductora" y le dí un beso, un pico, y luego fui intensificando el beso lentamente, puse mi mano en su nuca y la otra eb su cintura y le empujé contra el colchón, cayéndome encima de él.
Mis manos acariciaron cada parte de su cuerpo, sin parar de besarle. Al principio no paré, hasta que poco a poco fui apartándome cada vez más hasta que me levanté. Él estaba sudando, apunto de quitarse la camiseta y con un gran bulto en el pantalón. Le miré, casi descogonándome, desde el borde de la cama.

-¡Inés!- casi hiperventilaba- No me seas...-
-Esque Marcus puede llegar en cualquier momento-puse vocecilla de inocente y de que no sabía de que me hablaba.
-¡¿QUÉ?! ¡Buuuuuufff..! ¡Aaaaaaggg!- Cogió mi almohada y se la estampó en la cara.
-No hagas tonterías- le reprendí
-¡¿Tonterias?! Mira como me has puesto-
-Lo ves te puedo persuadir aun no podiendo ser diablesa-
-No me hagas esto..-
-No pienso continuar..-
-¡AAAAAgggg!- apretó mas la almohada
-¡Dios! Christian ya tienes una edad-
-Ya lo sé. Por eso estoy asi porque ya tengo una edad-
-¿Qué? [o.O]-
-¡Ains! [v.v'], que ya tengo 18 y las xorvas me ponen demasiado-
-¡Ostia![:O] ¡no jodas! [¬¬]- me reí.
-Riete todo lo que quieras, sé que tienes tantas ganas como yo-
-Para ser un ángel estas muy salido, ¿sabes?-
-Sí, lo sé. Pero sabes que lo que siento por tí es verdadero- se puso serio-
Te quiero y lo sabes.-
-Sabes que yo también te quiero- Pensé para mi: eso creo...
-Ya no sé lo que sientes así que tendré que fiarme-
-Vamos a centrarnos en lo que nos tenemos que centrar-
-Ahora mismo toda mi sangre esta alimentando a otra cabeza-
-¡Christian, tio¡... Piensa en otra cosa-
-No quiero pensar en otra cosa que no seas tú-
-Recuerda que le juraste a Cris ayudarla-
-Ya, tienes razón, vamos a ponernos con ello-

Se incorporó de la cama y volvimos a bajar, con la intención de esperar a Marcus, pero no nos hizo falta, porque ya estaba en su sitio de siempre, leyendo un libro, que parecía tener más de cien años. La verdad esque al verle me puse contenta, no sólo porque al fin nos podría ayudar, si no, también, porque quería verlo.

-¡Marcus![:D] Al fin llegaste- sonreí- ¿Dónde estabas?-
-En la librería-
-Bueno, no importa. Necesitamos tu ayuda- Habló Christian, con odio. Y con un poco de dolor al decir que necesitábamos su ayuda.
-Mmmm... ¿Para qué?-
-Un demonio-
-Contarme-
-Es un demonio que ha poseído a nuestra amiga y se ha atrevido
a atacar a Inés-
-¿¡A Inés?! ¿Estás bien?- Parecía muy alterado.
-Si,si,si, estpy perfectamente [^^]-
-Pues- se relajó- por lo que me decís, parece un cazador y al que
le han pagado muy bien, pero no me explico como te ha atacado, por
mucho que hayas hecho debemos respetarte. A no ser... que sea un
"IRFIO"- Al pronunciar esta palabra, Christias se llevó las manos a los oídos y se encojió sobre sí mismo, como si sintiera un gran dolor, le agarré.
-¿¡Qué le pasa?¡-
-Es lo que pasa cuando se habla en demoníaco, a los ángeles
les pasa esto y a los humanos les sangran los ojos y la nariz
y le duele la cabeza. Pero es peor en los ángeles, les produce
un dolor muy intenso en todo el cuerpo y un fuerte pitido en los
oídos-
-¿Se pondrá bien?-
-Sí, en unos segundos, tranquila, pero querrá descansar, así que
mejor le dejamos-

Le dí un suave beso en la mejilla y una suave caricia.
Marcus y yo nos fuimos a la cocina.

-A ver ¿qué es un- bajé el tono- "Irfio"?-
-Pues es una larga historia-
-Empieza a contarla-
-Pues..Los Irfios son una de las razas más antiguas
del infierno, pero no respetan demasiado las normas.
Tu antepasado, espulsó a su raza al más profundo agujero
de la verno, por matar a su primogénito. Essa raza quedó
aislada de todo, quien se pusiera en contacto con ella
moririía, pero de vez en cuando alguien lo hace, para que
le hagan un trabajito- Tomó aire-Creo que alguien intenta
acabar con tu vida y creo que sé el motivo-
-¿Cual es?-
-La profecía-
-¿Que profecía?-
-Pues es algo, chorras-
-Tú dimela-
-Hace miles de años, tu abuelo, hizo una pauesta con Dios.
Apostaron que auien consiguiera mantener el cielo y el
infierno separados durante menos tiempo ganaría el pleno
poder sobre la Tierra. Todo estuvo tranquilo durante milenios,
hasta que tu padre quiso tener una hija, la primera princesa
diablesa. Con la seducción de un demonio y el poder de la realeza.
La niña, es decir tú, fue creada para enamorar al hijo de Gabriel
que viviría en la Tierra, entre los mortales, y así poder ganar.
Porque, si un demonio de la familia real mata a un ángel, al hijo
de un arcángel, que son los únicos que pueden concevir, conseguirá
el poder de ambos mundos y será el ser más poderoso. El problema
era esque un ángel y un demonio no se pueden tocar.. eso provocaría
el fin del Universo como lo conocemos.. asi que por eso no podias
enterarte de quién eras hasta que estubieras lista para acabar con él
a sangre fria, siendo humana... La profecía decía que vosotros
luchareis hasta que uno muriese, pero nadie habló de que os
enamorarais...-
-A si que somos juguetes-
-Siento que se tenga que enterar así-
-[:(]Y..¿quién me quiere matar?-
-Creo que los de su especie-
-Pero..¿por qué?-
-Si se enamora del ángel ganarán los ángeles, tanto si se enamoran
como si te mata-
-Eso no tiene sentido..-
-A ver... Si os casais ganan y si le llegas a odiar o él te llega
a odiar ganamos, y si le matas también-
-!!No somos juguetes¡¡-
-Me gustaría que no fuera asi.. pero esta es la relaidad-
-Entonces ¿Tú estas enamorado demí por la profecía?-
-Yo estoy aqué para cuando no sientas nada por el ángel-
-Sólo somos juguetes- Mi tono era sombrío.
-Luego pensaras en eso, ahora toca pensar en como liberar a su
amiga y salvarse usted-
-¿Tú sabes como?- Dejé el tema por el momento.
-Si-
-¿Como?-
-Con la sangre de un bendecido... Un ángel-





La Ine..+