"Parecía raro, pero yo sonreía. Si era la última vez qe él iba a verme, tenía que intentar que su recuerdo respecto a mí fuera bonito, feliz. No triste y lloroso. Ya lloraría después, cuándo el "hasta siempre" me persiguiera por las esquinas de mi casa, y el dolor de tenerlo pegado a mí se hiciera insoportable. Porque, al fin y al cabo, tenerle aquí, junto a mí, era genial, y, aunque fuera la última vez, me hacía feliz."
todo se va a acabar. y yo sonrío:)
soy rara, vale? pero le quiero. y eso no va cambiar.
elii
lunes, 8 de junio de 2009
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